Delicias árabes en un rincón catracho de Tegucigalpa

Después de varios meses en silencio regreso a compartirles más lugares así que aquí les va que hay de nuevo en comiendo hoy con Jen:

No es un secreto para nadie que Honduras cuenta con un porcentaje importante de inmigración de origen árabe, quienes llegaron a este país del trópico hace varias décadas, que se han establecido y que la mayoría de ellos  son exitosos comerciantes y muy reconocidos en territorio hondureño, hoy en día su segunda y tercera generación son quienes administran un sin número de empresas que no voy a mencionar porque ese no es el objetivo de este artículo, sin embargo quise dar una pequeña introducción y referencia ya que hoy les voy a contar sobre Gyros, un restaurante árabe ubicado en Tegucigalpa que tiene 28 años de existir; según me dijeron en el local cuando fui a almorzar este pequeño y maravilloso negocio nace por la herencia e iniciativa de una mujer emprendedora y matriarca de su familia que se asentó en tierras hondureñas por razones que desconozco; ella fundo Gyros, un pequeño y acogedor restaurante de comida del medio oriente, recetas exquisitas y con un sabor al que yo voy a llamar hecho en casa por la frescura de lo que se vende, es estilo buffet pero no vayan a pensar que se trata de 30 charolas o depósitos de comida, no,  son unos cuantos con platillos como: pipían relleno (algunos le llamamos pepian), marmaón, pollo asado, dolmades de hojas de uva y dolmades de repollo, ensalada tabule, humus entre otros y no falta una pequeña repisa con postres. 

Donde está ubicado? en el segundo nivel del centro Comercial Los Castaños en Tegucigalpa.

En nuestra visita probamos burma y flan de coco, ambos una delicia que vale la pena degustar.

Las porciones en Gyros son justas pero en realidad es  opción del comensal  la cantidad que coma pues las muchachas le van a servir más si usted lo pide. En nuestra visita probamos la ensalada tabouleh hecha con perejil, trigo, tomate y otros ingredientes, todos frescos por su puesto y servido sobre una hoja de lechuga bien fresca, el pollo asado es sencillo y delicioso, lo acompañamos con vegetales al vapor como se puede apreciar en la fotografía.

Otra recomendación y a decir verdad mi favorito en este lugar, es el pepián relleno con carne y arroz, no se exactamente como lo hacen pero le pregunte a una experta en la cocina que resulta ser pariente mía, mi tia Vilma para ser precisa y ella me explicó como prepara los pepianes rellenos pero esa receta la dejo para un próximo artículo ya que hoy le dedico este escrito a Gyros, tal como aparece en la foto aquí abajo a mi pipián le acompañé con pollo asado y dolmades de repollo que son una exquisitez.

Vamos con otra recomendación: el marmaon que si bien es cierto nadie lo hace como mi mama, en Gyros no dejan con ganas a nadie, las empanadas tanto de pollo como de carne son supremamente recomendadas.

Gyros es sin duda un secreto bien guardado en la ciudad de Tegucigalpa y aunque la comida no sea propiamente tradicional hondureña yo me atrevo a llamarla comida árabe-hondureña por el grado de influencia que esta cultura tiene en Honduras, es un aporte importante en muchos aspectos y en este caso en la gastronomía; ahora ya saben, la proxima vez que quieran almorzar algo diferente, delicioso, bien hecho y en un lugar tranquilo y modesto, Gyros es el lugar correcto.